Elecciones 2023: Armas

Se vienen las elecciones 2023 y la tenencia de armas legales es un tema que despierta fuertes debates y posturas encontradas en nuestra sociedad, fogoneadas por intereses turbios que ven en el desarme una salida para lograr el poder, mantenerlo o, directamente, obtener fondos. Sin embargo, pese a las posturas desarmistas imperantes en medios y discursos políticos que confunde legalidad con ilegalidad, es fundamental comprender y valorar la importancia del derecho a tenencia y portación de armas en el contexto de la seguridad y la defensa personal. Es fundamental comprender y defender la importancia de este derecho, que nos brinda no solo una herramienta de autodefensa, sino también la posibilidad de practicar actividades como la caza deportiva, el tiro recreativo y la conservación de la historia a través del coleccionismo, de manera responsable y segura.

En un país donde la delincuencia y la violencia están lamentablemente en aumento, contar con la posibilidad de tener un arma legalmente adquirida y registrada puede marcar la diferencia en momentos críticos. La tenencia de armas legales brinda a los ciudadanos la capacidad de protegerse a sí mismos, a sus seres queridos y a su propiedad en situaciones de peligro inminente cuando el famoso “estado presente” brilla por su ausencia. Nefasto slogan repetido hasta el hartazgo por políticos y periodistas que confunden, por ignorancia o intención, al Gobierno con el Estado. “El Estado tiene el monopolio de violencia” Si, campeón, el Estado y no el Gobierno. El Estado lo forman todos los ciudadanos y significa que “la violencia” se puede ejercer legítimamente si está dentro de un marco legal. Sin ir más lejos, la legítima defensa por ejemplo.

En primer lugar, es crucial destacar que la tenencia de armas legales no implica un riesgo para la sociedad si se establecen los requisitos adecuados. La Argentina, mal que les pese a muchos colectivistas, tiene una ley de armas vigente. Desactualizada, si, pero no por ello menos clara. Los legítimos usuarios, aquellos que cumplen con la ley y obtienen los permisos correspondientes, son ciudadanos responsables y comprometidos con la seguridad. Son personas que han demostrado su idoneidad y han pasado por rigurosos procesos de verificación de antecedentes y evaluaciones psicofísicas siendo muchos de esos requisitos arbitrariedades ilegitimas. Si se aplicaran esas mismas barreras a los funcionarios, seríamos potencia.

Es importante destacar que la tenencia de armas legales no significa promover la violencia o alentar acciones temerarias. Por el contrario, implica asumir una responsabilidad personal y cumplir con una serie de requisitos y regulaciones estrictas establecidas por la ley. Los legítimos usuarios de armas están comprometidos con la tenencia responsable, el respeto por las normas y la capacitación adecuada para su uso seguro y efectivo. La tenencia de armas legales no solo es un derecho fundamental, sino también una forma de garantizar la seguridad personal y de nuestros seres queridos. En un mundo cada vez más incierto y con crecientes índices de delincuencia, contar con una herramienta de autodefensa puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte en situaciones extremas. Es un hecho innegable que la presencia de un arma legal y correctamente utilizada puede disuadir a potenciales agresores y proteger a las personas en peligro.

Además de la seguridad personal, la tenencia de armas legales también juega un papel importante en la preservación de las libertades individuales y la defensa de los derechos ciudadanos. En momentos de crisis, en momentos en donde los gobiernos están sobrepasados por la delincuencia y el crimen, en donde los funcionarios no están capacitados más allá de rosquear el lugar en una lista para seguir atornillados a la función pública descuidando sus deberes, la capacidad de autodefensa se convierte en un pilar fundamental para salvaguardar nuestra libertad y garantizar que la República no se quiebre. Además, la tenencia de armas legales fomenta la práctica responsable de actividades como la caza deportiva que permite la conservación de especies autóctonas y el tiro recreativo. Estas disciplinas, lejos de ser meros caprichos, son verdaderos deportes que requieren destreza, disciplina y respeto por la naturaleza y las normas de seguridad moldeando el carácter de los individuos. Los legítimos usuarios de armas encuentran en estas actividades una forma de conectarse con la naturaleza, desarrollar habilidades y cultivar valores como la concentración, el trabajo en equipo, la responsabilidad y la disciplina. Saber lo que se puede provocar da una noción real de las implicancias de cada decisión que se toma, cada palabra que se dice o acción que se realice. El miedo y la cobardía no son valores como se intentan imponer desde los grupos de poder. Saber elegir cuándo y cómo actuar o no hacerlo, si es un mérito.

Es fundamental comprender que la tenencia de armas legales no es un privilegio exclusivo, sino un derecho respaldado por la ley y reconocido internacionalmente. Negar este derecho a los ciudadanos que cumplen con los requisitos establecidos por la legislación solo serviría para desarmar a la población de bien, dejándola vulnerable a la voluntad de aquellos que buscan imponer la violencia y la opresión. Por supuesto, es fundamental destacar que la tenencia de armas legales debe estar acompañada de una legislación clara y precisa, dejando de lado las políticas que se han llevado a cabo hasta ahora, que han sumido a la Argentina en el caos y la violencia, caldo de cultivo para el accionar narco y la impunidad pública. La legislación vigente, que los políticos de Juntos y del frente de Todos (hoy con nombre nuevo pero con el mismo olor) han obviado, establece los mecanismos necesarios para garantizar que quienes cumplen con los requisitos puedan acceder a las armas de fuego y que estas sean utilizadas de manera segura y responsable. Como la mayoría sabe, hoy sólo los criminales pueden pasearse a sus anchas portando un arma. Ellos y quienes trabajan para el Estado.

En conclusión, la tenencia de armas legales es un derecho fundamental que permite a los ciudadanos protegerse a sí mismos, a sus seres queridos y a su propiedad en momentos de peligro. Es un pilar de la seguridad y la defensa personal, y contribuye a preservar nuestras libertades individuales. Promover la tenencia responsable y el cumplimiento de la ley es crucial para mantener una sociedad segura y empoderada. La tenencia de armas legales es un derecho fundamental que nos brinda la posibilidad de defendernos, practicar deportes y disfrutar de actividades que forman parte de nuestra identidad cultural. Es imprescindible comprender y defender este derecho, siempre dentro del marco de la legalidad y la responsabilidad individual. La tenencia de armas legales no es un peligro, sino una garantía de seguridad y una forma de ejercer nuestra libertad de manera responsable y consciente.

Sólo un partido político asegura, por escrito, este derecho en su plataforma electoral, específicamente en el punto 17 del apartado de Seguridad. Los demás no.

Es un momento histórico para votar como Legítimos Usuarios. Una oportunidad única.

Votemos con conciencia.